Quizás has visto antes esta palabra. O quizás es la primera vez que la ves y estás leyendo por la curiosidad de saber qué es un moodboard.
La traducción literal del vocablo sería “tabla de humor”. Pero si no queremos ser tan literales podemos decir que es un tablón de estilos o de gustos, o incluso de ideas. A mí, sin embargo, me gusta decir que es “el cajón de las ideas del cliente para su web”.
Hasta ahora se han venido usando mucho en diseño de moda y de interiores. Allí son viejos conocidos. Actualmente los empezamos a ver en el diseño gráfico y el diseño web. En estos campos se están convirtiendo en una herramienta muy útil para captar los gustos y las ideas de un cliente y realizar un trabajo “a su medida”.
Cómo hacer un moodboard
Tanto si vas a trabajar diseñando tu web, como si trabajas para un cliente o, incluso, si eres un cliente, saber cómo diseñar un buen moodboard te será muy útil.
Un moodboard es un tablero, físico o virtual, donde se van a colocar una serie de ideas, textos, tipografías, imágenes, texturas, colores,… Esos elementos deberán estar relacionados con el proyecto al que queremos dar diseño y estilo.
La herramienta más usada, hablando del mundo del diseño online, para crear estos tableros o moodboards es, sin lugar a dudas, Pinterest.En sus tableros puedes guardar enlaces a diseños web que te gusten o sean acordes con la idea o con la distribución o gusto que tengas. También se pueden guardar tipografías. Y, lo que es más importante, se pueden guardar imágenes y colores que te inspiren (o a tu cliente) en el diseño.
Existen también otras herramientas más específicas, como Niice o Dropmark, que permiten crear tableros con un bonito estilo y muy “empaquetados”. Y tienen una versión gratuita básica.
La versión “crafty”.
Otra forma de crear un moodboard es rememorar nuestros tiempos escolares y hacerlo como un “collage”.
La idea sería utilizar un tablero de corcho, por ejemplo, o una pizarra blanca, o, simplemente, una cartulina.
Y sobre ese “tablero” físico colocar imágenes, textos, letras que nos gusten, colores, elementos diversos que evoquen algo,… Incluso se pueden usar texturas como tejidos, hojas, etc.
Crear un moodboard para tu proyecto, paso a paso.
Cuando creo un moodboard para un cliente sigo un proceso muy concreto, que te voy a explicar para que puedas aplicarlo a tus trabajos. Aunque tan sólo vayas a diseñar tu web, o tu logotipo, te será útil captar tus ideas y juntarlas en un único elemento.
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Comienza con una idea – palabra.
Piensa en algo que defina el proyecto en el que vas a trabajar de forma global.
Imagínate que creas un moodboard para Ikea. Esa palabra podría ser “sencillo”, o quizás “limpio”, o “barato”. Usa palabras que no sean demasiado “físicas”. Es mejor buscar algo más abstracto y buscar imágenes que nos evoquen esa sensación.
Busca muchas imágenes, entremezcla conceptos, pero siempre ligados por algo. Y no te olvides de que todo lo que busques debe darte un “pellizco en el corazón”. No pongas imágenes por poner, sino porque aportan algo al tablero.
Crea una lluvia de ideas (y de imágenes).
Incluye muchos elementos en tu tablero. Puedes usar fotografías, pero también imágenes con un solo color, con un patrón o con una textura.Usa cosas que te inspiren, como te he dicho, que te pellizquen el corazón. Que transmitan, en cierto modo, esa idea que sacaste en el primer paso.
Está perfectamente permitido incluir frases inspiradoras, imágenes de objetos que tengan algo de relación con tu idea, o de lugares o situaciones.
Y, por supuesto, no debes olvidarte de incluir esas tipografías que tanto te gustan y encajan con tu idea.
Selecciona lo mejor de lo mejor.
Cuando tengas suficientes elementos en tu tablero, cuando te des por conforme sabiendo que has aportado todas las ideas que están relacionadas con tu palabra base, pasa a crear tu moodboard.
Si has estado usando Pinterest, es el momento de seleccionar los elementos que mejor se adaptan a la idea. Y ahora sólo tienes que incluirlos en una de las dos plataformas que te he comentado al principio de este artículo. O puedes usar una plantilla de Photoshop y crear tus propios moodboards.
Si lo estás haciendo bien, te estarás divirtiendo mucho con el proceso. Y estarás encontrando un montón de ideas relacionadas con tu idea principal que te ayudarán en el diseño posterior.
Te aseguro que ésta es una de las herramientas que más pueden ayudar a un diseñador en las primeras fases.
Un moodboard muestra un camino más o menos claro a seguir para alcanzar el objetivo de cumplir con las expectativas del cliente.
Te ayuda a no perderte en el bosque de las ideas y a llegar a la casita de la abuelita sin que el lobo te atrape.
¿Te atreves a crear tu moodboard? No importa si usas Pinterest o cualquier herramienta. Si lo haces, anímate a compartirlo con nosotros (un link estará perfecto), en los comentarios. ¡Espero ver tu creatividad!
Y ahora te dejo que estudies el sencillo ejemplo de moodboard que te he dejado más arriba: fíjate que todas las imágenes tienen un «feeling» muy parecido, ¡y no me refiero al tema!.
Y te añado un enlace a un recurso gratuito de una gran experta, Gudy Herder:
Me ha encantado éste post, yo uso por mi trabajo constantemente moodboards pero hay gente que aún no, y les será super útil ya que está muy bien desarrollado el concepto y paso a paso, yo soy fan del crafty 😉
Gracias por compartirlo!!
Hola Silvina,
es cierto, en la mayor parte de los ámbitos del diseño no está muy extendido su uso. Y realmente es increíble la conexión que te da con el cliente. Muchas veces les resulta muy difícil explicarte lo que quieren, pero si pueden poner ejemplos, enseñarte imágenes y tipografías que les gustan y elementos que les inspiran, puede que no aciertes al 100% a la primera, pero seguro que la idea que propones, incluso aunque le tengas que hacer modificaciones, se acepte.
¡No hay nada más frustrante que tener que inventarte 5 «layouts» distintos para una web porque no tienes ni idea de lo que quiere el cliente!
¡Gracias a ti por comentar!